¿Alguna vez has observado a tu hámster correr frenéticamente en su rueda o alrededor de su jaula? Si es así, habrás podido notar que pueden alcanzar velocidades asombrosas cuando lo necesitan. Entonces, ¿cuál es la velocidad de carrera de un hámster?
Un hámster puede correr hasta 10 km/h, siendo el hámster sirio el campeón de los hámsteres en esta disciplina.
¿Qué velocidad puede alcanzar un hámster en plena carrera?
Si hay que responder de manera sencilla y directa, la velocidad de un hámster generalmente se sitúa entre 5 y 10 kilómetros por hora. Y no subestimen a los más pequeños del grupo, como los hámsteres enanos y los hámsteres sirios. ¡También son capaces de alcanzar esa velocidad!
De hecho, podrías sorprenderte al descubrir que los hámsteres sirios son las verdaderas estrellas de la pista entre todas las especies de hámsteres.
Por supuesto, no todos los hámsteres corren exactamente a la misma velocidad, y eso es lo que les da su encanto, ¿verdad? ¡Cada hámster es único!
El hámster, alias Speedy Gonzales
Mencionamos al hámster sirio anteriormente, este atleta de los roedores que, gracias al tamaño de sus miembros, es coronado como el hámster más rápido. Con patas más grandes que las de un hámster enano, el sirio puede recorrer una mayor distancia en menos tiempo que su pequeño primo. Sin embargo, no te engañes, el hámster enano, aunque sea más pequeño, sigue siendo extremadamente ágil, incluso si tiene que descansar un poco más entre sus sprints.
No te engañes, los hámsteres no siempre han vivido en jaulas desde tiempos inmemoriales. Están dotados de todo lo necesario para esquivar, esconderse y escapar de sus depredadores, así que, en realidad, los hámsteres son más ágiles de lo que son veloces.
Pero, ¿por qué corren los hámsteres?
Para simplificar, los hámsteres corren esencialmente por dos razones principales. Antes de las explicaciones, ¡un video para morirse de risa!
El miedo a los depredadores
La primera razón de su carrera desenfrenada (y es un verdadero esfuerzo para estos pequeños seres) es la presión de los depredadores. Por “presión de depredadores”, entiende que los hámsteres no siempre han sido animales de compañía domésticos. Tenían que sobrevivir en la naturaleza, y su carrera es un puro instinto de supervivencia.
Así que, si te despiertas una noche porque tu hámster ha decidido hacer su jogging nocturno en su rueda, es porque, en algún lugar de sus instintos, sienten la necesidad de hacerlo.
Desafortunadamente, los hámsteres son parte de las presas, lo que significa que, cuando vivían en libertad, eran bastante vulnerables. Por lo tanto, tuvieron que desarrollar tiempos de reacción rápidos y ser capaces de sentir cuándo estaban en peligro, para saber cuándo salir corriendo.
Observa, además, que tu hámster hace pausas cuando utiliza su rueda. ¿Por qué? Porque en la naturaleza, tendrían que hacer una pausa para determinar dónde se escondía su depredador, lo que a su vez les habría dado tiempo para calcular su próximo movimiento.
Su territorio
La segunda razón por la cual los hámsteres corren tiene que ver con el territorio. Antes de ser tu mascota favorita, estaban acostumbrados a ser buscadores de alimento en la naturaleza. Tenían que encontrar un hábitat seguro, no muy lejos de una fuente de comida, y cerca de otros hámsteres para poder reproducirse.
Por supuesto, dependiendo del tipo de hámster, los espacios necesarios para vivir felices varían. Esto es algo que vemos claramente en los diferentes tamaños de jaulas que compramos para nuestras mascotas. Así que, aunque estas criaturas sean bastante pequeñas, realmente pueden recorrer mucho terreno cuando lo necesitan.
Los hámsteres son criaturas muy activas, trabajando duro para recolectar y almacenar comida para que les dure mucho tiempo. Por supuesto, tu hámster doméstico no necesita hacer esto, pero podrías notar que esconde comida debajo de su paja, una pequeña reserva para los días difíciles.
¡Proporcionales todo lo que necesitan para correr!
Está claro que tu hámster está lleno de energía. Por lo tanto, es crucial, si tienes uno, asegurarte de que su jaula esté bien equipada. El objetivo es mantenerlo ocupado y permitirle desahogar toda esa energía (positiva, por supuesto).
Una rueda para hámster es un clásico. También hay muchos juguetes para morder para hámsteres. Estos son excelentes para sus dientes y constituyen una buena distracción. Permiten que el hámster juegue mientras se mantiene estimulado.
Al limpiar la jaula, una bola para hámster es imprescindible. Permite que tu hámster corra y gaste su energía. Además, facilita su localización en comparación con una libertad de movimiento total. La bola es realmente un imprescindible.
Como conclusión, un pequeño consejo: si sacas a tu hámster de su jaula, evita perderlo de vista. Porque, seamos sinceros, ¡podría ser difícil de alcanzar!